Una conejita se lanza a cavar la madriguera de sus sueños, pese a no tener idea de lo que hace. En lugar de confesarle a sus vecinos sus fallos, sigue cavando hasta meterse en problemas. Después de tocar fondo (torpemente), aprende que no es ninguna vergüenza pedir ayuda.
Una conejita se lanza a cavar la madriguera de sus sueños, pese a no tener idea de lo que hace. En lugar de confesarle a sus vecinos sus fallos, sigue cavando hasta meterse en problemas. Después de tocar fondo (torpemente), aprende que no es ninguna vergüenza pedir ayuda.