Un alegre cuarteto de esqueletos de cementerio sale a jugar y bailar por la noche en esta terrorífica entrega de Silly Symphony, al son de la espeluznante música de Edvard Grieg (adaptada por Carl Stalling). La ingeniosa animación de Ub Iwerk incluye varios momentos divertidos con animales y un xilófono hecho de huesos.
Un alegre cuarteto de esqueletos de cementerio sale a jugar y bailar por la noche en esta terrorífica entrega de Silly Symphony, al son de la espeluznante música de Edvard Grieg (adaptada por Carl Stalling). La ingeniosa animación de Ub Iwerk incluye varios momentos divertidos con animales y un xilófono hecho de huesos.