En el siglo XVII, tras pasar una noche con una sensual prostituta, el rey Felipe IV de España decide que quiere ver desnuda a su mujer. Su decisión provoca una verdadera revolución entre sus súbditos.
El rey Felipe IV se queda absorto al contemplar desnuda a Marfisa, la prostituta más famosa de Madrid. A partir de ahí, le pide a la reina que le deje verla desnuda, lo que escandaliza a la corte.