A Topper Harley, un piloto de élite, le encomiendan una misión: destruir una planta nuclear de Saddam Hussein. Pero Topper está mentalmente desequilibrado y, con toda probabilidad, la presión le desbordará.
A un piloto de élite expulsado por insubordinación (Charlie Sheen) lo reclutan para unirse a una misión de alto secreto para las fuerzas aéreas, viéndose obligado a bregar con un almirante incompetente (Lloyd Bridges) y un escuadrón de pilotos selectos que, o bien no ven tres en un burro, o bien son directamente imbéciles. También rivaliza con la perfección militar personificada (Cary Elwes) por ganarse el favor de la sensual psiquiatra de la base (Valeria Golino).