A finales de los 90, en su primer caso, Flore Robin, una joven inspectora de la policía de Perpiñán, acude a una escena del crimen muy impactante. Esta fascinante investigación, basada en hechos reales, marca el inicio de una larga serie de asesinatos y una búsqueda incansable que la obsesionará durante casi 20 años.
La estación de las chicas perdidas
A finales de los 90 y principios de los 2000, en Perpiñán, una adolescente desaparece y tres jóvenes son asesinadas en el barrio de la estación de tren. Todas son morenas, guapas y se mueven por un fuerte deseo de emancipación. Sus rostros aparecen en los periódicos, lo que les vale el apodo de «Las desaparecidas de la estación». Flore Robin, una joven inspectora, comienza su carrera en la policía el mismo día en que se descubre el primer cadáver. Debe colaborar con el capitán de policía Franck Vidal y su mentor Félix Sabueso. Basada en hechos reales, una extraordinaria investigación se lleva a cabo durante los siguientes 20 años por todo el país, en busca de un misterioso y despiadado asesino en serie mientras una madre se aferra a la esperanza de encontrar a su hija con vida.